Individuos del árbol Urquizu

A continuación vamos a exponer a modo de resumen los datos y anécdotas encontradas en los distintos individuos del Árbol Urquizu y también del Árbol otros Urquizu,  que pertenecen a la misma rama familiar pero de momento no tenemos ningún dato para unirlos.

Árbol Urquizu

Gerónimo Urquizu contrajo matrimonio con Lamberta Royo en 1646 y tuvieron seis hijos: Gerónimo, Marco Antonio, Roque, Hilario,  Joseph  y Flora.

Flora Urquizu Royo religiosa agustiniana de clausura en Mirambel. Murió en 1739 tras realizar el Pío Legado y reparto según su última voluntad. Testo para que sus bienes se repartieran a los parientes y en especial a las pobres doncellas que contrajeran matrimonio mediante la instauración del Pío Legado. Actuaron como patrones  Gerónimo Urquizu (su hermano) y el Vicario. Estableció que tendrían derecho a este legado los descendientes de sus hermanos. Dio principio a este legado, el casamiento de Josepha Urquizu (1740) con Pascual Aniento en Mirambel. Hay constancia que poseía la masía del Mojón de la Vega en Cantavieja.

Agustín Urquizu Belvis nació en Mirambel, hijo de Marco Antonio Urquizu Royo y Thomasa Belvis, nieto de Gerónimo Urquizu y Lamberta Royo. Fue carpintero y residió en Mirambel, Arnes y Valderrobres. Murió ahogado en el río Tastavins en Rafols (Teruel) el 19 de Mayo de 1732. “Al ser carpintero con muchos hijos y solo poseer sus herramientas no fue enterrado en Valderrobres hasta después de tres días, siendo pagado el entierro por su mujer y su yerno Gerónimo Dardos”.

 Joseph Urquizu Belvis se caso con Bárbara Monforte Fandos hija de Domingo Monforte y Agustina Fandos y sobrina del Reverendo  Esteban Monforte.  Sus descendientes cobraron del Pío Legado de Flora Urquizu y también del Rdo. Esteban Monforte.

Francisco Urquizu Monforte: hijo de Joseph Urquizu Belvis y Bárbara Monforte Fandos, fue carpintero. Primer Patrón del Pío Legado Esteban Monforte. “En 1765 siendo Sindico, Menor Regidor Tercero, firmo por el alcalde Miguel Castell y por Jaime Marín que dijeron no saber escribir” (1).

Pedro Urquizu, sobrino del patrón del Pío legado del Rdo. Esteban Monforte (Agustín Urquizu Pastor). Debe verificarse su filiación pues faltan datos que confirmen que sea hijo de Antonio Urquizu. “Fue en 1837 alcalde de Mirambel y logro salvar la campana mayor de la iglesia de la orden dada por Cabrera de requisar todas las campanas de la jurisdicción” (1).

 Gaspar Urquizu nació en Mirambel (Teruel). No tenemos fuentes documentales para afirmar que su padre fuera Pedro Urquizu Zurita pero si datos que nos orientan. Es descendiente de Gerónimo y Lamberta (cobró la dote del Pío Legado de Flora Urquizu en 1777, cronológicamente pertenece a esta generación y vivió en Mirambel. Existe también la posibilidad de que sea hijo de su hermano Vicente o Antonio Urquizu Zurita, los demás varones Urquizu de Mirambel tienen descendencia conocida. Fue pintor y escultor y en  1777 doró la Piana de la Ermita de San Martín. Se casó con Antonia Beser el 26 de Abril de 1773. Tuvieron tres hijos y una hija, Ramón, Pedro, Martín y Teresa.

 Ramón Urquizu Beser pintor y escenógrafo, hijo de Gaspar y Antonia nació en 1775. Se conserva diferentes cuadros, entre ellos sobresale uno de San Martín.

 “Celebre pintor y escenográfo, especialista en retratos al natural, con residencia en Zaragoza, considerado el más hábil artista de su época. Gano grandísimas sumas, pero fue tan derrochador y carabela que murió pobre, hasta el extremo de tener que pagar su hermano Pedro los gastos de su enfermedad, funeral y entierro” (2).

Fue uno de los primeros discípulos de la escuela de la Academia de Bellas Artes de San Luis. Obtuvo en 1797 el 2º premio de pintura. En 1799 realizó el primer telón del nuevo teatro cómico de Zaragoza y en 1815 realizó otro de más envergadura, en 1828 trabajo el la pintura interior del mismo teatro”. (3)

“…del incendio y saqueo del pueblo de Orihuela el 25 de octubre de 1809 únicamente se salvaron la iglesia parroquial recién construida tras la mediación del sacerdote Juan Valdemoro y algunas casas patricias. La virgen se salvó del incendio porque la ocultaron los sacerdotes Juan Ambrós, José Sánchez Moreno y Ramón Urquizu (4).

Trabajo junto con su hermano Pedro y sus cuñados Ramón, Pedro y Felix Ferrer Guasch en la recostrucción de la iglesia de Mirambel en1835, realizaron el decorado interior de la iglesia de Mirambel, que fue incendiada en 1835 durante las guerras carlistas. Pusieron en marcha la imprenta de Mirambel durante la guerra carlista y editaron el periódico, proclamas y otros documentos (1).

Pedro Urquizu Beser hijo de Gaspar y Antonia. Se alisto en el Tercio de Albarracín bajo el mando del teniente Cases según relación de la paga de 31 de diciembre de 1808, pertenecía a la 2ª Compañía dirigida por el capitán José Asensio. (“Malatarde” consecuencias económicas y sociales de la batalla del Tremedal Juan Manuel Berges Sánchez. (Gasco y Guimbao D. La guerra de la Independencia)). “Valiente soldado de la guerra de la independencia e intrépido capitán que lucho con mucho tesón en los dos sitios de Zaragoza. Cayó prisionero y los franceses se lo llevaron a Francia, haciéndole padecer y sufrir mucho por su enérgico  y entero carácter. Retirado a su pueblo, cultivo con  aprovechamiento las Bellas Artes, y a él se debe el pintado y dorado de la mayor parte de los altares de esa iglesia. Murió soltero en Mirambel a los 80 años(5).

Teresa Urquizu Beser hija de Gaspar Urquizu y hermana de Ramón y Pedro, se casó con Ramón Ferrer Guasch (o Guart, en algunos textos) en una ceremonia religiosa en 1814.

Ramón Ferrer Guasch nació en Mirambel, se casó con Teresa Urquizu Beser.

“Magnifico escultor, realizó imágenes y altares para Belmonte, Torresillas, Peñarroya, Forcall, Villarroya, Valdealgorfa, Pueyos de Alcañiz… Su fama salto los confines de nuestra tierra, un Lord de Londres le encargó una corrida de toros completa, que realizó con gran satisfacción  del aristocrático inglés. Fue autor de San Fernando y Santa Cristina para la iglesia del Buen Suceso de Madrid, por el encargo del mismo Fernando VII, que le recompenso debidamente. También fueron notables escultores su hermano Félix Ferrer Guart, su hijo Pedro Ferrer Urquizu y sus sobrinos Félix y Miguel Ferrer Galcerán hijos de su hermano Félix” (6).

Su padre fue Miguel Ferrer que nació en una masía del Portell en 1760. Yendo de niño con el rebaño, sin más instrumento que su navaja, hacia filigranas en maderas de boj. El Pintor de Zorita, Pedro Guart, persuadió a su padre que lo llevara a Valencia para formarse en el arte. Años más tarde se casó con una hija de Pedro Guart y se estableció en Mirambel (6).

Pedro Ferrer Urquizu  hijo de Teresa Urquizu y Ramón Ferrer, nació en 1814 en Mirambel, fue escultor.

Juan de Dios Ferrer Urquizu hijo de Teresa Urquizu y Ramón Ferrer, nació en 1818 en Mirambel, murió a la edad de 38 años el 31 de Octubre de 1856. Fue Escultor, pintor y misionero. Realizó muchas imágenes para iglesias de Valencia y la de Mirambel. Se marcho de misionero a la isla de Malta y posteriormente a la China donde fundó en el Tonkin una catedral, una escuela de Bellas Artes y un convento.

 Jacinta Foz Ruiz: natural de Beceite, hija de Félix Foz y Antonia Ruiz de Peñarroya, casada con Miguel Urquizu Machín. Fue fusilada a los 49 años por orden de Cabrera tras el asesinato de su madre (María Grino) junto con su hija Francisca. Sus muertes se anotaron en el año 1838, pero figura la fecha de 27 de febrero de 1836.

Recibió auxilio espiritual del sacerdote José Vallés. Hizo testamento del modo que pudo a sus hijos, dejando misas por su alma y por la de su hija que también iba a ser fusilada. Murió fusilada en esta villa en el huerto del Martinete (un molino harinero cerca de Valderrobres) por una partida de las tropas de don Ramón Cabrera, por mandato del mismo, luego fue sepultada en el cementerio de esta villa”.

En un primer momento Cabrera mandó fusilar a cuatro mujeres, pero Mariana Guardia (nuera de Jacinta) fue indultada. Mariana Guardia estaba retenida por ser mujer de un liberal, aunque ella era hija del oficial carlista Pedro Guardia, el cual, al enterarse, pidió el indulto de su hija a Cabrera pudiéndola sacar de la cárcel (la presoneta) de Beceite (7).

Francisca  Urquizu Foz: natural de Beceite, soltera, fue fusilada a los 18 años junto a su madre Jacinta Foz, por orden del general Cabrera, el  27 de febrero de 1836, así consta en el certificado de defunción (tomo 9, folio 171):

“El 27 de febrero de 1836, murió fusilada en esta villa, en el huerto de Martinete, por una partida de las tropas de D Ramón Cabrera y por mandato del mismo. Francisca Urquizu Foz, soltera, de 18 años de edad, natural de Beceite hija de Miguel Urquizu y de Jacinta Foz…siendo sepultada en el cementerio de esta villa”

Al parecer Cabrera mantenía ciertas relaciones amorosas con Francisca, con la que se creía iba a casarse, llegando incluso a suponerse que estaba embarazada de éste. (7)

Joaquín Urquizu Foz hijo de Miquel y Jacinta Foz fue fusilado por mandato de Cabrera el 1 de octubre del 1838 tras la derrota de Maella (8). Fue 2º comandante del cuerpo de voluntarios de las tropas del Infante Carlos en Albalate (Teruel) en 1832, (Debe verificarse que sea el mismo individuo)

Miguel Urquizu Foz hijo de Miquel y Jacinta Foz. Notario y diputado provincial por Valderrobres en 1865 (9)

Tomas Urquizu Foz: hijo de Miquel y Jacinta Foz. Fue alcalde y juez de Valderrobres en 1871 (10).

(1) Benigno Palos Fabregat. Apuntes para la historia de mi pueblo, Mirambel. Palma de Mallorca 1927.
(2) José Altaba Escorihuela. Mirambel. Una joya entre montañas. Castellón 1988
(3) García Guantas “Telón y teloneros”. Artigrama nº 10-1993.
(4) “Malatarde” Consecuencias económicas y sociales de la batalla del Tremedal Juan Manuel Berges Sánchez.
(5) José Altaba Escorihuela. Mirambel. Una joya entre montañas. Castellón 1988
(6) José Altaba Escorihuela. Cantavieja y su Baylía. 1ª Ed. Madrid 1978
(7) Luis Latorre Albesa. Beceite, chirigol de historias, personajes y curiosidades. 2004.
(8) La Iberica 13-10-1860.
(9) La Iberia 10-10-1865.
(10) La Esperanza 21-2-1871

Árbol otros Urquizu

Julián Urquizu Maestro carpintero escultor seiscentista de Segorbe. Autor del altar de San Antonio Abad que en 1686 fue colocado en la parroquial de Ulldecona

Santiago Urquizu maestro carpintero en 1691 trabajó en la reparación del castillo de Agoncillo (Logroño).[1]

Juan Urquizu de la Guardia escultor era vecino de Daroca (Zaragoza) en 1632. [2]

Tomás Urquizu médico de Ulldecona (Tarragona) en el siglo XVIII.[3]

Manuel Demetrio Urquizu, titulo de abogado expedido por el gobierno provisional en 1825, fue corregidor de Alfaro (Logroño).[4]

Antonio Urquizu párroco en Tortosa (Tarragona) en 1835

José Jaime Urquizu 1851 de Villafranca del Cid (Castellón) miembro de la Sociedad médica de Socorros Mutuos.[5]

Antonio Urquizu del comité del partido democrático progresista de Segorbe (Castellón).[6]

Domingo Urquizu presidente y Ramón Urquizu y Francisco Urquizu vocales del comité republicano de Beceite en 1869.[7]

Antonio Urquizu y Ferrer de Teruel obtuvo el privilegio de inventor de 1881 por un aparato destinado a la extracción de aceite de oliva, de cacahuete y demás semillas oleaginosas, evitando capachos[8]. Publico en 1886, Trabajos estadísticos basados en datos oficiales por los que se evidencia la disparidad de cómo se tributa y necesidad de verdadera reforma en los amillaramientos.  Madrid, Imprenta de José Gil y Navarro.

[1] Cadiñanos Bardeci. Agoncillo y su fortaleza.

[2] Las Artes en Aragón en el siglo XVII según el Archivo de Protocolos Notariales de Zaragoza de 1613 a 1696. A. Bruñén Ibáñez, L. Julve Larraz, E. Velasco de la Peña.

[3] Antonio Raga Canalda. Natalitat, fecunditat i il·legimitat a Ulldecona s. XVIII. Raïls, Any: 1994 Núm.: 4

[4] Inventario de abogados riojanos del siglo XVIII-XIX. B. Larrañaga

[5] Boletin de Medicina, Cirugía y farmacia, 24-8-1851.

[6] Discusión 17-9-1880

[7] La Discusión 28-3-1869

[8] Revista de España, mayo 1882

[5] Inventario de abogados riojanos del siglo XVIII-XIX. B. Larrañaga

[6] Boletin de Medicina, Cirugía y farmacia, 24-8-1851.

[7] Discusión 17-9-1880

[8] La Discusión 28-3-1869

[9] Revista de España, mayo 1882